viernes, septiembre 22, 2006

...Las nubes de Camila...

Siendo sinceras, Camila nunca fue muy feliz en su matrimonio. Casada desde hace seis años con Bruno, nunca estuvo muy satisfecha. Aunque tenía un hijo muy bello llamado Axel, las relaciones profundas con su marido nunca se dieron. Eran a decir de Camila, monotonas, su vida personal con su marido era por decir lo menos incipiente y aburrida, no obstante que no habia nada de pasión o muy poquita entre el matrimonio, ella lo queria con devoción y hasta con lealtad.

Bruno siempre procuro darle todo a Camila, el dinero para los vestidos, las mascarillas, las botas, los accesorios,y todo lo que a ella se le antojaba. Aunque yo pocas veces veía a Bruno, se veía que tenía un gran amor por su esposa y su hijo.

Camila sin embargo estaba aburrida, y en un principio para hacer algo diferente se dejo cortejar por Leandro, quien era compañero de trabajo de Camila. Durante ocho años, Leandro le había rogado a Camila que le diera una oportunidad y finalmente ella accedio a "conocerlo" más profundamente.

El idilo empezó con desconfianza de Camila, quien en un principio no se dejo llevar por la galanura y presencia de Leandro. Sabia que no era de confiar por que era conocido por todos como "Un Don Juan". Aunque Camila intentó poner un freno, la experiencia y la lengua de Leandro hicieron de las suyas.

Luego de nueve meses de coqueteo constante, Camila, estaba enamorada. No solo enamorada, sino loca de amor, perdida, absolutamente absorta, extraviada, produndamente afectada de amor, no sabia decir otra cosa que no fuera "Leandro", olvidanose incluso de su familia y de su hijo.

Yo y Sara tramos de evitarlo, mil veces discutimos sobre lo que hacia, pero como en todos los casos que uno se enfrenta a un enamorado, nos ignoró completamente dia a dia, hasta que por fin, exploto la bomba de la verdad

Camila, supo por voz de alguien lejano anuestro entorno pero de toda nuestra confianza, que Leandro, no solo tenia una esposa e hijos, sino que ademá sostenia relaciones simultaneas con al menos tres mujeres al mismo tiempo en diferentes ciudades.

La verdad sobre Leandro, salió a flote suavemente y hasta casualmente, cuando nuestro confidente nos pláticaba sin imaginar que Camila era una de las engañadas.

Esa tarde, con el corazón, el alma, el ser, las sensaciones, la ilusión rota, Camila cerro su boca, no dijo nada, no hizo nada, no comio nada, no lloró nada. La vimos salir desolada de la oficina esa tarde, pero no llegó a su casa, ni llegó a ningún lado, se extravió desde entonces y nadie la encuentra por ningún lado.

Sin embargo, yo tengo una esperanza, un día Camila me dijo que le gustaría ser nube, y quiero creer que estas nubes, son Camila, que todavía llora el amor puro que una vez, le entregó a Leandro....

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Seria estupendo convertirse en nube y viajar a lo lejos cubrir con nuestra lluvia de emociones muchos rostros muchos campos, igual y los campos florecerian mas bellos. Sin embargo solo Dios sabe de eso y de Camila

Andrea R A dijo...

Querida Tiyita:

Sin duda los campos serian otros, si los llovieramos con nuestras lagrimas, pero tanbíén como tu señalas, SOLO DIOS SABE..: )

Gracias por venir y vuelve pronto si? : )

Vania B. dijo...

Pucha que somos brutas las mujeres. La lengua de los hombres nos puede transtornar la vida.

Pobre Camila nube, si todas las mujeres engañadas y dolidas fueran nube tendríamos el cielo nublado siempre.